Una niña de 12 años, explotada sexualmente, fue sometida a un aborto en la ciudad de Bella Unión en el departamento de Artigas. El explotador, un hombre de 75 años, fue procesado con prisión por el Juez letrado Javier Gandini.
La niña acudió al centro de salud con sus padres y la decisión de realizar la interrupción del embarazo fue exclusiva de (Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), según fuentes judiciales de la ciudad de Bella Unión. Raúl Oxandabarar, vocero de la Suprema Corte de Justicia aseguró que la nueva legislación de interrupción voluntaria del embarazo obliga al personal de salud a poner en conocimiento de la Justicia cuando un caso tiene “apariencia delictiva”. El caso no fue denunciado y el aborto se realizó con el consentimiento de los padres. El juzgado de la ciudad fronteriza abrió una investigación y ordenó a la policía la entrega del feto para la realización de una prueba de ADN.
Además del caso de explotación se abrió una investigación por posibles casos de abuso sexual intrafamiliar hacia la niña. La familia ya había sido objeto de intervención del Centro de Protección de Derechos del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), en ese caso por la hermana adolescente de la niña, que hoy se encuentra en un hogar del instituto.
El presidente del INAU, Javier Salsamendi, se encuentra en el departamento de Artigas para tomar contacto directo con el caso e informó que se realizará una conferencia de prensa para poner en conocimiento sobre el desarrollo del caso.
